La niebla salina y la corrosión en los conectores
El metal es una parte esencial de un conector y, para poder utilizarse en entornos complicados, deberá supera una prueba que evalúa su resistencia a la corrosión.
La mayoría de las causas de la corrosión del metal se relacionan con el oxígeno, la humedad, la temperatura y los contaminantes. La corrosión reduce la resistencia del metal y provoca fracturas, lo cual es grave si hablamos de un entorno en el que se den vibraciones que podrían, en caso de ceder, provocar cortocircuitos y fallos en el equipo.
Para probar su resistencia, los conectores son puestos a prueba sometiéndolos a un entorno llamado niebla salina: dentro de una cámara de corrosión, se expone el metal a una solución salina atomizada con aire comprimido para acelerar el proceso y poder evaluar su resistencia (ISO 9227). Así se consigue en poco tiempo lo que, en condiciones normales, llevaría varios años en entornos hostiles, y se puede observar el cambio sufrido y garantizar, en caso de superar la prueba, que el conector cumple lo estipulado en la normativa.
Los equipos utilizados en las industrias de defensa, aviación, automotriz, electromecánica, telecomunicaciones y otras deben operar en ambientes extremos durante mucho tiempo. Por lo tanto, es esencial pasar la prueba de niebla salina para garantizar una alta confiabilidad del producto.
CENVALSA pone a su disposición multitud de conectores que superan esta y otras pruebas necesarias para garantizar su perfecto funcionamiento en cualquier situación. Si necesitas más información, no dude en ponerse con contacto con nosotros a través de esta web o llamando al (+34) 91 721 60 10.